La Circulación en tiempos del COVID-19

Como se viene sosteniendo en este espacio, todos construimos socialmente al tránsito y parece mentira que a casi un mes del Aislamiento Obligatorio decretado por el Gobierno Nacional haya personas que no comprendan que la medida es extrema y existan numeradas excepciones en las cuales está permitido el tránsito peatonal y vehicular, pero para hacerlo es necesario llevar un comprobante.

Existen diversos certificados y trámites acordes a las actividades que se desarrollan por ello ponemos aquí los lugares de consulta y gestión disponibles a partir del 6 de abril del 2020.


PERMISOS DE CIRCULACION:

Como establece Decreto 297/2020, las personas sólo podrán realizar desplazamientos mínimos e indispensables para aprovisionarse de artículos de limpieza, medicamentos y alimentos. En estos casos no requerirán permisos de circulación. Sin embargo, las personas que se encuentran exceptuadas del cumplimiento del “aislamiento social, preventivo y obligatorio” y de la prohibición de circular -detalladas en el artículo 6 del mencionado Decreto, y en la Decisiones Administrativas 429/2020 y 450/2020-, deberán contar con una certificación que acredite su condición frente a la autoridad competente en el caso de ser requerido.


Para saber qué certificado corresponde en cada caso dirigirse a esta dirección:
https://www.argentina.gob.ar/coronavirus/aislamiento/exceptuados

Allí están las excepciones y en detalle las tramitaciones o formularios a completar.


PERMISOS DE CIRCULACION VEHICULAR

La página web puesta a disposición para gestión y consulta es la siguiente:
https://www.argentina.gob.ar/solicitar-certificado-unico-habilitante-para-circulacion-emergencia-covid-19

Para mayor información y mientras dure el aislamiento social, preventivo y obligatorio. Por dudas o consultas escribí a Mesa de ayuda al correo serviciosdigitales@modernizacion.gob.ar.



ATENCION A LAS SANCIONES

Violar el aislamiento social ordenado, sin justificación puntual, es delito. Les cuesta a muchos comprenderlo, por lo inusual, pero jurídicamente no hay vueltas.

El decreto de necesidad y urgencia emitido por el Ejecutivo Nacional, en el marco de la pandemia mundial por el coronavirus, impone el aislamiento obligatorio para todas las personas que habitan en el país o se encuentren en él en forma temporaria, con las excepciones previstas en la misma norma.

El artículo 205 del Código Penal Argentino prevé una pena de seis meses a dos años de prisión, para el que violare las medidas adoptadas por las autoridades competentes, para impedir la introducción o propagación de una epidemia.

Por otra parte circular en vehículo sin justificación es motivo para que la Autoridad Competente incaute el rodado. Los trámites de recuperación del mismo por el mismo aislamiento no tienen fecha por lo cual quién se vea afectado quedará por varios meses privado de su movilidad.

La estadística de Argentina es penosa en este contexto en el cual hay muchísimas más personas procesasdas por violar el aislamiento que casos de enfermos.

Desde Conduciéndonos nos sumamos al QUEDATE EN CASA!!!

Covid 19 - Tránsito y Aislamiento

Foto Rosario3

Desde el viernes 20 de marzo de 2020, se cumple en nuestro país el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio para evitar la propagación del Corona Virus que está haciendo estragos a nivel mundial.

Esta medida reduce al mínimo la circulación de personas en la vía pública, las que solamente pueden hacerlo por razones establecidas en el Decreto 297/2020-

Respecto al transporte público de pasajeros por automotor, se mantienen los servicios urbanos y los interurbanos de cercanías (distancias menores a los 60 Km), también taxis y remises.  Larga Distancia tanto de trenes como aéreos están suspendidos y las fronteras cerradas.

Desde entonces la circulación peatonal y vehicular se redujo considerablemente. También los accidentes en rutas.

Efectores de la salud reconocían en medios periodísticos nacionales que eso solo contribuye a liberar plazas destinadas a cuidados intensivos en Hospitales y Sanatorios. Recordemos que nuestro país, en épocas normales, mantiene una altísima tasa de siniestralidad vial con muertos y heridos graves.


Alerta Cuarentena
A nivel de tránsito urbano, se están produciendo siniestros graves y es un tema que merece nuestro análisis y reflexión.

El hecho que haya disminuido el porcentaje de vehículos como se dijo, hace que quienes circulan supongan que puedan desatender ciertas previsiones e incluso violar normativas "total no pasa nadie".

Esa falsa percepción del riesgo es la que hace que aún en épocas de aislamiento se produzcan importantes incidentes de tránsito. El factor humano constituye el principal responsable.

La baja de vehículos particulares pone en evidencia la gran cantidad de motos y bicicletas afectados a servicios de cadeterías y delivery que operan en rubros permitidos como por ej. Farmacias y Comidas a domicilio.
Se trata de un grupo vial que registra la tasa más alta en cometimiento de faltas a la hora de transitar, tales como la carencia de luces, el no uso del casco, circulación por veredas, circulación en contramano, giros indebidos en avenidas, pasos en rojo, etc. etc. El uso de bicicletas y motos, los expone mucho más a la hora de un accidente/incidente.

El transporte público en tanto merece su atención también, los ómnibus son vehículos de gran porte cuya reacción y maniobrabilidad no es sencilla. Los Taxis como siempre cuando están ocupados desarrollan una velocidad mayor que cuando van libres. Hay conductores muy previsores y otros que "la van canchereando" y constituyen un riesgo.

Tenemos que ser conscientes que en la situación que actualmente nos encontramos debemos duplicar la prevención. Porque lo que nosotros pensamos también lo piensa el otro.
No debemos confiarnos que porque el tránsito disminuyó la posiblidad de que nos pase algo es remota, porque puede ser al revés.

Debemos pensar en que más allá del motivo por el cual nos toca desplazarnos, hay otras personas que pueden ser afectadas por nuestras acciones.
En lo humano, pensemos la cantidad de cosas que se nos ocurran, todas ellas con resultados lamentables.
En lo material, dañar un vehículo propio o ajeno, significa que estará paralizado hasta que termine el período de aislamiento y eso puede demandar semanas o meses. Podemos generarle un mal pasar a muchas familias incluso la nuestra.

Por último en cuanto al tránsito peatonal, permitido para atender necesidades básicas como alimentación o asistencia a familiares y excepcionalmente actividades laborales contempladas en la emergencia se ve sumamente reducida.
Pero el hecho que exista menos movimiento, no habilita a obstaculizar las vías o veredas con vehículos cruzados como se está viendo con frecuencia.

Tenemos que ser conscientes que las vías peatonales tienen que estar libres. No es justo que una persona mayor o con problemas de movilidad deba descender a la calle para poder transitar.
Una cultura que de por sí está siempre vigente, ahora parecería verse más.

Y para terminar, por el lado del control, también se advierte una merma.
Se realizan procedimientos para verificar en grandes avenidas o accesos los motivos de los desplazamientos. Pero en los barrios la realidad es otra.

Tomemos consciencia!!!


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